SALONES PEQUEÑOS PENSADOS PARA DOS
Que el piso donde se vive sea pequeño, no es excusa para no sacar el máximo partido a la decoración. Da igual que se trate de una vivienda con pocos metros. Seguro que tiene muchos rincones donde se puede decorar de manera que quede agradable, único y con mucha personalidad.
El aspecto de la vivienda no tiene que ver con el tamaño, e incluso hay muchas soluciones para que una casa pequeña esté “bien vestida” y pueda resultar tan intensa como otras más grandes y con más espacio para dedicar a decorarlos.
El truco está en ofrecer el menor número de obstáculos visuales y dejando que la percepción visual sea más amplia y agradable. Los muebles, que son los elementos que más espacio ocupan, han de situarse junto a las paredes. Así se evita el tener sofás, mesas y sillas en el centro de la estancia, hay mucho espacio libre que permite dar una sensación de que es más grande.
Los colores de los muebles también es importante. Hay que buscar colores luminosos, como el blanco, que den más luz a la estancia y creen la perspectiva de que es mucho más grande. Los colores oscuros provocarán el efecto contrario y resulta contraproducente, aportando la sensación de que no hay suficiente espacio.
El color de paredes y techo debe mantener también estos tonos, para ayudar a iluminar la estancia. La presencia de uno o varios espejos es también una buena idea para permitir el paso de la luz. Las cortinas de las ventanas también han de ser ligeras y permitir que la luz tenga un protagonismo importante.
En cuanto al suelo, los azulejos deben de seguir la tónica general. Huir de los tonos oscuros y si se trata de diseños algo más elaborados, que mantengan la estética general de la estancia. Es decir, que no sean muy recargados si los muebles son modernos y minimalistas, la opción más adecuada para este tipo de estancias, más pequeñas.